- Contare hasta cinco, después de eso no volveré a hacer esto, no volveré a abrazarte, ni pedirte que me beses.-
Un sentimiento extraño me invadió, no estoy segura de que sentimiento en especifico, pero era un dilema entre hacerlo y no.
Sus brazos me envolvían y sus manos subían por mi espalda hasta mi cuello, me tenía contra su cuerpo y su cara justo frente a la mía. Yo sabía que si él seguía insistiendo de esa manera si lograría que lo besara. Tenía muchas ganas de besarlo, sus labios pe parecían irresistibles.
- Uno... – Comenzó a contar, me miraba directamente a los ojos, yo agache la cabeza y me incline hacia atrás para retirar ligeramente mi rostro del de él. -Dos... – Continuaba.
Yo por dentro pensaba que podría besarlo, pero sabía que me invadiría la culpa, no sabía si podría estar bien sabiendo que mi novio se encontraba n otro sitio y yo aquí, con él, tan cerca a punto de besarnos.
- Tres…- Cada vez sentía más intenso el deseo de besarlo y sentir el calos de sus labios contra los míos, no dudo que fuesen deliciosos. Sentía que ya no podía más. Quería besarlo pero no sabía si sería lo correcto.
- Cuatro…- Ya no podía, definitivamente pensé en hacerlo. Me preguntaba si era verdad lo que dijo antes, que no volvería a hacerlo más, me preguntaba si después de esos “cinco” no mostraría más interés en mí. – Por favor Antony. No me hagas esto.- Le tome el rostro y lo mire a los ojos. – En verdad. No mee hagas esto- Le repetí.
- ¡Cuatro!...- esta vez lo dijo con énfasis, pronunciando con su voz que sería mi última oportunidad de poder besarlo.
¡Rayos! en verdad lo deseaba, lo deseaba como a nada en ese momento. Miles de cosas pasaban por mi cabeza, pensé el lo que sucedería si seguía o desistía.- Eres fuerte- decía en mi mente- en realidad besaba desearlo, pero no podía doblegarme por un deseo, o tal vez si, aunque hasta ahora aun lo deseo.- hazlo, hazlo- Me decía también por dentro, no quería quedarme con las ganas de bésalo. Eran más mis ideas de aprobación ante la situación de besarlo.
Sentí un nudo en la garganta, tenía un impulso masivo para hacerlo que me detenía al mismo tiempo, ahora tenía tan solo un instante para decidirlo, no podía pensar en otra cosa que en un sí o un no.
- Y cinco…- La piel se me rizo. Todo había terminado. Estuvo por un instante aun estrechándome con sus largos Brazos y sus grandes manos, y yo aun miraba hacia abajo.
Comenzó a soltarme poco a poco, sus manos recorrieron mi espalda y se detuvieron en mi cintura para después retirarlas por completo. Cuando ya no sentí mas sus manos y levante la cara para verlo, supe que había perdido la mejor de todas las oportunidades con él, si no es que la única.
Me arrepentí, me arrepentí rotundamente de no haber aprovechado la ocasión y que estábamos tan cerca.
- Ya me están llamando.- Le dije cuando sentí vibrar mi celular en mi bolsillo, lo mire y efectivamente me llamaban de mi casa, ignore la llamada. – ¿Nos vemos mañana?- le pregunte esperando que su respuesta fuera afirmativa.
- - Ok, no t preocupes- me contesto con desanimo, un desanimo que sentí muy dentro de mí como su fuese un desanimo propio.
Yo deseaba besarlo, pero una relación me lo impedía. El tenía toda la libertad de hacerlo y mostraba en sus ojos el deseo de besarme, yo sentí un nudo en la garganta.
Me incline de nuevo hacia él y le di un beso n la mejilla para despedirme, no me respondió, pero ya no tenía más tiempo y debía irme rápido.- Cuídate.- le dije. Me di media vuelta y corrí hacia mi casa, no escuche más palabra de él.
Entre a la casa y me recargue en la puerta al cerrarla, supe que tal vez lo había perdido. Me lo reproche por un largo rato, sabía que de cierta forma no era lo más correcto besarlo aunque yo lo deseaba intensamente pero ya no estaba tan segura de que él volviera a pedírmelo.
Lo habré perdido...??